sábado, 3 de noviembre de 2012


"Pienso que un espacio sacro debe estar de alguna manera ligado a la naturaleza, lo que no significa que tenga que ver con el animismo o panteísmo"

Es necesario destacar la capacidad de Ando para absorber diferentes ideologías y plasmarlas en sus proyectos. Vemos que esta cualidad está presente a lo largo de toda su obra, pero se hace especialmente potente en este caso. La relación con la naturaleza se destaca una vez más como principal concepto de la obra, haciendo de esta, una autentica obra responsable hacia el paisaje y su contexto. 

Tadao Ando (Osaka, 1941)
La geometría del espacio humano


Las edificaciones de este arquitecto autodidacta japonés, que primero fue boxeador profesional con debut allá por el año 1958, nacen del conflicto, de su peculiar forma de entender la vida y, por extensión, la arquitectura, disciplina a la que decidió dedicarse después de ver como la luz entraba por el óculo del Panteón de Roma. 




Una arquitectura que tiene más que ver con la experiencia que con el puro intelecto, unos diseños en los que busca plasmar la sabiduría alcanzada a través de las vivencias vitales, una arquitectura que se eleva por encima de las preguntas, las dudas, y también por encima de emociones como el miedo o el sufrimiento, porque Ando ve su trabajo como creador de emociones sublimes y eso sólo es posible transmitirlo al espectador si el arquitecto se juega la vida en cada obra, porque la pasión sólo puede salir del conflicto.















"El boxeo es un deporte de lucha en el que uno sólo cuenta consigo mismo. Durante los meses que preceden a un combate, te dedicas a adiestrar el cuerpo y la mente mediante la práctica y el ayuno. Es un deporte draconiano en el que te juegas la vida, abrazando tanto la soledad como la gloria. Mis experiencias como boxeador, la intensidad de saltar al cuadrilátero, la soledad de tener que luchar completamente solo, sin contar con nadie, se convirtió en mi piedra de toque creativa"



Por ello, encontrarse con una obra de Ando le supone al espectador un momento de profunda emoción, de encontrarse con una geometría clara, nítida, de una compleja simplicidad, sólida y delicada que impone su presencia y, al mismo tiempo, tienen un carácter fuertemente evocador.






"A primera vista mi arquitectura connota desnudez, como si quisiera crear la clase de espacio abstracto que se obtiene al suprimir todos los elementos prácticos, funcionales y humanos. En realidad, yo no lucho por un espacio abstracto sino por un arquetipo de espacio"


Iglesia en el Agua 1985-1988
Yufutsu, Hokkaido





Concepto
Envueltas en una estética carente de ornamento, muchas de las obras de Tadao Ando basan su riqueza en la relación del edificio con la naturaleza. En ese sentido, la Iglesia en el Agua, es una de sus más logradas realizaciones en las que utiliza a la naturaleza como elemento involucrado en el diseño. En ella, Ando logra crear un microcosmos en el que combina de manera simple pero magistral conceptos sobre lo profano y lo sacro, lo artificial y lo natural, lo cerrado y lo expuesto, el vacío y el infinito.


Lugar y Contexto
"Quiero darle al poder de la naturaleza una presencia en la sociedad contemporánea y proveer de este modo la clase de lugares estimulantes que hablan directamente a cada sensación del hombre como un ser vivo, corpóreo. Es más, recuperar de los estratos de la historia no la forma o el estilo, sino la visión esencial de la naturaleza y la vida que discurre desde su raíz. El espíritu de la cultura, en otras palabras”




La Iglesia en el Agua se alza en medio del magnifico entorno natural de Hokkaido, región de inviernos fríos que se halla en el extremo norte del archipiélago japonés. Zona de bosques espesos, de primavera a verano tiene una frondosa vegetación, en otoño las hojas cambian de color y en invierno se cubre de nieve.


En realidad es una pequeña capilla que pertenece al hotel Alpha Resort, especializado en organizar la perfecta luna de miel para recién casados. El resort esta compuesto de varios equipamientos hechos en una arquitectura que imita la del norte europeo y organiza sus habitaciones en unas torres de interior kitsch, que se levantan en su entorno sin ninguna consideración ni ningún tipo de integración al paisaje.








En cierto sentido, la obra de Ando surge como reacción hacia aquella arquitectura desarraigada, producto de las corrientes internacionales que busca uniformarlo todo mediante patrones estandarizados.  La postura de Ando termina entonces por cobrar un fuerte sentido. La consecuencia lógica a esta búsqueda de expresión regional de los espacios, da como resultado una arquitectura mucho más poética y dotada de una gran sensibilidad hacia el espacio.  




Emplazamiento
En el emplazamiento, se ha desviado un arroyo natural para crear un lago artificial, y la iglesia, que tiene una forma geométrica, se levanta contra el telón de fondo del lago. Este paisaje, que integra paisaje natural, jardín y arquitectura, es una obra maestra del diseño paisajista japonés contemporáneo. 


Composición y Estructura

"La aproximación al conjunto se realiza siguiendo la trayectoria del muro exento y ascendiendo por una suave ladera hasta llegar a la zona de acceso, definida en sus cuatro lados por un vidrio mate blanco. Este recinto de luz, en el que se alzan cuatro cruces contiguas, se mezclan la luz solar, intensa y directa, y la luz filtrada a través del vidrio mate, envolviendo a los visitantes en un sutil contraste que da solemnidad al lugar”


Un muro en forma de L en planta protege el edificio propiamente dicho y lo separa del lago artificial, conduciendo al visitante hacia el interior de la iglesia. Al principio, este extenso muro impide ver el lago. Mientras se pasea y se recorre su longitud, solo se escucha el sonido del agua. Al doblar la esquina en un extremo del muro, súbitamente aparece la vasta extensión del lago,  entonces se tiene una sensación de liberación, como si el cuerpo se fundiera con el paisaje.




"Del recinto parte una escalera, oscura y curvada, que conduce a la repentina visión de una quinta cruz y del lago azul oscuro. El horizonte separa el cielo de la tierra, lo sagrado de lo profano. El paisaje va cambiando gradualmente de apariencia, en una transición en la que los visitantes pueden sentir la presencia de la naturaleza y de lo sagrado. La luz del sol, el lago y el cielo continuaran entonando distintas melodías" 








La composición de la iglesia se basa en la intersección de dos volúmenes (un prisma de base cuadrada de 15m de lado y un cubo de 10m de lado) que comparten una esquina en un área de 5x5 m.


La región de Hokkaido es famosa por su clima frió  debido a los vientos que descienden de Siberia. Para tal efecto, a las paredes de 25cm de concreto se les ha añadido un recubrimiento térmico de 5cm y otro interior de 60cm logrando un espesor de 90cm.



La poza de agua, hacia la cual descienden suaves colinas de césped  se halla dividida en plataformas de 15m que se escalonan junto a la pendiente y desaparecen en un colector al final del estanque. De esta manera, se añade a las cualidades visuales del estanque, el murmullo de las pequeñas caídas de agua. 




Al lado de la iglesia se ubica un pórtico de concreto de 6m de alto, sosteniendo una viga que se extiende 16m. Este pórtico simbólicamente refuerza la idea de transición de lo profano a lo sacro, mientras que funcionalmente acoge la mampara corrediza que limita entre la iglesia y el estanque. De esta forma, cuando el clima lo permite, es posible correr la mampara maximizando la relación intima de la iglesia con su entorno. Para no interrumpir la continuidad de la superficie acuática, el carril de la mampara se encuentra ligeramente sumergido, siendo imperceptible a la distancia.  


Interior y Detalles
Los elementos técnicos y los detalles presentes en todo el edificio deben de haber exigido un gran esfuerzo de diseño y ejecución, pero en apariencia no ha quedado ni un rastro visible de ese esfuerzo.




El interior de la iglesia es de una impecable sobriedad. Cinco filas de bancas de madera dispuestas en pares a cada lado de la sala, de un simplísimo diseño, son acompañadas por dos sillas diseñadas por Ando, que recuerdan al mobiliario de Charles Renie Mackintosh y unos floreros de forma cónica invertida dispuestos sobre un armazón de madera.





Las paredes alojan unas fenestraciones que proveen una fuente lumínica estableciendo una pauta junto a la retícula del concreto visto, típica de las construcciones de Ando. El piso es recubierto por losas de granito negro.



Piel, Materialidad y Luz
La dureza del entorno ha dado lugar a un hermoso paisaje, y un esfuerzo imperceptible para el observador ha dado lugar a un hermoso edificio. El esfuerzo realizado sin esfuerzo aparente ha creado un espacio cristalino.

Los materiales empleados se caracterizan por una sencillez y sobriedad, característica esencial de todas las obras de Ando.  En este proyecto predominan el concreto, el vidrio y la madera cuya simpleza y moderación permite que exista una convivencia armoniosa que no roba protagonismo al escenario natural.


Una técnica especial de mezcla y vibrado le da al concreto una suavidad única  como si estuviera recubierto de vidrio, a la vez que permite a la luz reflejarse y desmaterializarse provocando un múltiple juego conforme varíen las horas del día o el día del año. 




Sus simples formas geométricas acogen la naturaleza, y la luz transformadora da complejidad a sus espacios. Ando dirige memorables retablos arquitectónicos exteriores con luz natural mediante la colocación de paredes que cortan el cielo en trozos y reflejan el agua. 


El aspecto mas notable es que Ando ha sustituido la pared frontal de la iglesia, en la que generalmente se disponen imágenes divinas de determinado significado religioso, con una representación mas viva y elocuente del Creador: la naturaleza misma. De esta forma, se provee un escenario vivo, multicolor y siempre cambiante, que va desde las paletas sepias en otoño, los glaucos matices del invierno, las floridas manchas en primavera y los intensos verdes en verano.



"Crear arquitectura es expresar aspectos figurativos del mundo real, como la naturaleza, la historia, la tradición y la sociedad, en una estructura espacial, que es un concepto abstracto, dotado de una lógica clara y transparente" 
Tadao Ando